Hace mucho, mucho tiempo, en una galaxía muy lejana, un superviviente del planeta Namek llego al pequeño planetoide conocido como FDB, donde fue recibido por sus habitantes con los brazos abiertos. En agradecimiento, él creó unas Bolas de Dragón como regalo, aunque no eran muy poderosas y estaban bastante limitadas. Por ejemplo, sólo podría devolver a su mundo a una única persona... ¿Veis ya por dónde va la cosa?
Este es el pequeño planetoide FDB. Habéis sido abducidos para divertimento de una élite cósmica, y enviados a FDB con la misión de reunir las Bolas de Dragón como único medio para volver a vuestro hogar. Sólo uno podrá hacerlo, pero podéis aliaros o sacrificaros... O quizás no.